El traje nuevo del Rey

El siguiente es un cuento del escritor danés Hans Christian Andersen del año 1837, sin duda que 183 años después sigue totalmente vigente. He tomado la libertad de cambiar o reemplazar algunos nombres como forma de comprobar su vigencia.

Hasta la misma persona de un rey (en adelante presidente de la república), llegaron dos charlatanes (en adelante asesores y ministros o yes Men) que se decían a si mismos sastres o tejedores. Afirmaban que eran capaces de elaborar las mejores telas, los mejores vestidos y las mejores capas (llámese medidas sociales, económicas de seguridad y de salubridad), que ojos humanos (pueblo de Chile) pudieran haber visto, sólo exigían que se les entregase el dinero necesario para comprar las telas, los bordados, los hilos de oro y todo lo necesario para su confección.

Ahora bien dejaban bien entendido que tales obras (medidas sociales, económicas de seguridad y de salubridad) sólo era posible verlo por aquellas personas que realmente fueran hijos de quienes todos creían que era su padre (la clase política, los grupos económicos y la derecha en general), y solamente aquellas personas cuyos padres no eran tales no serían capaces de ver la prenda (el 99.99% de los Chilenos).

Admirose el rey de tan maravillosa cualidad y otorgó a los charlatanes todo aquello que estos solicitaban y encerrados en una habitación bajo llave, simulaban trabajar en confeccionar ricas telas con las que hacer un traje para el rey, y que este pudiera lucirlo en las fiestas que se acercaban.

Curioso el rey de saber como iba su vestimenta, envió a dos de sus criados (grupo de expertos) a comprobar como iban los trabajos; pero cual fue la sorpresa de estos cuando a pesar de ver como los picaros hacían como que trabajaban y se afanaban en su quehacer, estos no podían ver el traje ni las telas. Obviamente supusieron ambos que no lo podían ver porque realmente aquellas personas que ellos creían sus padres no lo eran y avergonzados de ello, ni el uno ni el otro comentaron nada al respecto y cuando fueron a dar explicaciones al rey se deshicieron en loas y parabienes para con el trabajo de los picaros (yes Man, nada muy distinto a la actual realidad).

Llegado el momento en que el vestido estuvo terminado, el rey fue a probárselo pero al igual que sus criados no conseguía ver el traje, por lo que obviamente cayó en el mismo error en que ya habían caído sus criados y a pesar de no ver vestido alguno, hizo como si se probase el vestido alabando la delicadeza y belleza del vestido. Los cortesanos que acompañaban al rey (UDI, RN principalmente) presa de la misma alucinación también se deshicieron en alabanzas con el vestido a pesar de que ninguno de ellos era capaz de ver el vestido. Y es que conocedores todos de la cualidad del mismo, de que sólo aquellos que fueran hijos verdaderos de los que creían sus padres, solamente ellos serían capaces de contemplar el vestido, y no queriendo nadie reconocer tal afrenta todos callaron y todos afirmaron, desde el rey hasta el último de los criados.

Llegado el día de la fiesta (cuenta pública, puntos de prensa, discursos al país), el rey se vistió con el supuesto vestido y montado en su caballo ( televisión, redes sociales) salió en procesión por las calles de la villa (Chile), la gente también conocedora de la rara cualidad que tenía el vestido callaba y veía pasar a su rey, hasta que un pobre niño de corta edad (el 99.99% de los Chilenos), inocente donde los haya, dijo en voz alta y clara "el rey va desnudo".

Tal grito pareció remover las conciencias de todos aquellos que presenciaban el desfile, primero con murmullos y luego a voz en grito todos empezaron a chismorrear "el rey va desnudo", ... "el rey va desnudo"; los cortesanos del rey y el mismo rey se dieron pronto cuenta del engaño y es que realmente el rey iba desnudo.

Cuando fueron a buscar a los picaros al castillo, estos habían desaparecido (renunciado) con todo el dinero, joyas, oro, plata y sedas que les había sido entregado para confeccionar el vestido del rey. El engaño había surtido efecto y el rey iba desnudo.

Cualquier similitud con la realidad es sólo coincidencia...o no?

FIN